Chistera

Chisteras griegas

Chisteras griegas.

El Egeo, siempre el regreso a ese mar transparente y azul. Donde una vez el mismo Zorba vino a darme la mano para desembarcar de un navío. Recuerdo que era 1950, una época en la que el mundo crecía y la felicidad con él. La compañía naviera de mi padre estrenaba barcos y ruta. Así que esa visita obligada a Éfeso, lugar donde nacieron mis antepasados se me antojaba muy apetecible, o como dicen ahora, me apetecía un montón. Para la ocasión mi vestido elegante y mi chistera. En el puerto sonaban las sirenas, los hombres reían, las mujeres bailaban y mi Zorba particular no me soltaba de la mano. Mi padre sonreía desde el balcón de las autoridades y el su primer barco, Ulises de Aquitania le respondía con todas sus bocinas.

Las calles eran un hervidero de gente, los niños nos seguían, las persianas se abrían y los balcones plagados de flores de todos los colores, se llenaban de personas que aplaudían a nuestro paso. No quiero negar que la presencia no sólo del barco de mi padre, si no el de todas las otras navieras, llenaba de esperanza y de futuro al viejo Éfeso. Que de nuevo tornaba su clásico esplendor y el lugar que le correspondía por derecho en el Mediterráneo.

Y al llegar de nuevo a la plaza, con el cielo cubierto de pétalos, con el pueblo bailando con los buzuki y sus  acordes de la mar y el cielo. Mi padre, mi madre y hermanos, el bueno de Aristóteles y María Callas. Chisteras al aire con fuegos artificiales,vítores y brisa.

Y ahora pasado los años, donde tan distante se ven ya los barcos, abro mi armario y veo allí aquella chistera. Y me la acerco y la huelo y de nuevo suena el Sirtaki, las flores vuelan en mi habitación, el cielo se torna azul y el asfalto en cristalina agua azulada. Mis padres vuelven a reír y empiezo a danzar, a dar vueltas en mi habitación, como aquella vez con mi Zorba, con aquellos niños dando palmas, con el sonido del Ulises, con el Onassis y su Calas, con el emperador del Mediterráneo, con el chapotear de los delfines, con el calor de ese sol tan maravilloso en mi rostro, hasta caer de nuevo exhausta en mí en mi cama, riendo, entre lágrimas, envuelta en felicidad.

Y ahora que todo parece lo mismo, ahora que todo el mundo viste igual y sueña lo mismo, es gratificante saber que la chistera solo es para mujeres y situaciones muy especiales. Por eso si alguna vez en tu vida te sientes aplaudida, con júbilo disfruta ese momento que ojala tu propio Zorba te pueda acompañar.

Chistera 119 €

[social_essentials]

Chisteras
Chisteras, Mediterráneo y belleza

 

el rincón de mamá
El Rincón de Mamá
kerr pendientes

Pendientes de Salomón

Pendientes de Salomón

Fue en África, donde el rey Salomón ocultó en una de sus minas un fabuloso tesoro. Diversas expediciones a la zona no dieron con la famosa mina. Al final todo quedó en una leyenda que llegó a Hollywood. Para Deborah Kerr el papel que realizó en la película de las minas del rey Salomón fue muy intenso. La filmación en África conlleva su dificultad y la leyenda de Salomón en aquellas latitudes lo impregnaba todo.

Pendientes de Salomon
Deborak Kerr – Stewart Granger – Las minas del rey Salomón

Según se rumoreaba en Hollywood en los años 50 Deborak encontró lo que buscaba en su vida en aquel rodaje. Ignorábamos lo que encontró Deborak Kerr en aquel lugar, pero no nos cabe duda que fue parte de su felicidad.

Cuando un proveedor del Rincón de Mamá nos mostró unos pendientes, rápidamente acudió a nuestra mente, escenas de aquella película junto a Stewart Granger. Aquel bello paraje africano y la ilusión que se presiente al estar cerca de un tesoro. Cuando una se imagina el Dorado, una cueva mítica llena de tesoros, un lugar que oculta algo de gran valor, no puede negar que la imaginación se dispara y sonríe.

Quizás con los pies en la tierra, pensamos que aquel lugar mítico ya no existe, que puede que existiera, pero que ya no. Pero lo bueno, lo mejor de todo, es la sensación que queda cuando estamos pensando en la posibilidad de descubrirlo. Justo en ese momento, antes de que la razón nos arroje el tazón del agua fría.

Estos pendientes chapados en oro, son esa sensación antes de la razón. Son económicos, chapados en oro pero con un corte y un diseño de un gusto muy especial. Quisiéramos pensar y de hecho lo pensamos, que a estas alturas de la vida creemos solamente todo aquello que nos aporta, que verdaderamente el diseñador de los pendientes, sí estuvo en esas minas. Que halló el tesoro y que un sucio cuaderno apostado en una roca, hizo el esbozo a garabatos de aquello que estaba contemplado.

No sabemos si el original obra en su poder, pero si sabemos que el reflejo, que la sensación que existe otro maravilloso mundo es real. Un mundo que está a mitad de la realidad y los sueños. Un mundo donde se inspiran los artistas, donde beben los genios.

Quizás para cualquiera estos pendientes sean unos simples pendientes, pero nosotros estamos convencidos,que esto no es así. ¿Quieres verlos de cerca? Nos encantaría escuchar tus sensaciones.

Pendientes de Salomón (aro,criollas)

[social_essentials]

pendiente Salomón
Pendiente de Salomón
el rincón de mamá
El Rincón de Mamá
bolso Piel azul

Piel azul mariposa

Piel azul mariposa

Mi bolso de piel azul mariposa es una sonata, y luz de luna sus herrajes. Un regalo de André de la boutique Doré de una ciudad que ya no quiero recordar. La elegancia de su diseño, acorde con el semblante que termina ensanchandose en su base. Un cómodo bolso que sabe ser un claro en el maremágnum de bolsos que se cruzan en tu camino. Siempre es divertido ver cómo atrae las miradas de otras mujeres, como el mantero que vende réplicas de plástico te sigue con la cabeza mientras se pregunta porqué no tiene él ese modelo clonado en sintético despropósito.

Piel azul

André siempre ha sido un hombre de principios, y pese a la convención de Ginebra, la ONU, o los derechos de los animales, un buen bolso tiene su razón de ser y estar.

Durabilidad, inmortalidad, elegancia y gusto. Una nota afinada en la sinfonía maravillosa de ser mujer. Quizás el juicio un día se me nuble, quizás una mañana no reconozca tu nombre, o me abandone a mis pensamientos, pero mi bolso seguirá en su sitio, esperando a compartir juntos otro día.

En esta vida hay muy pocos días sinceros, olvidamos tantas cosas para aprender otras tantas. Y mientras tanto ese azul mariposa, ese azul como la leyenda, perdura en nosotros. ¿La leyenda? Si aquella de dos niñas que enviaron al campo, cerca de un sabio que todo lo sabía. Y aburridas las niñas decidieron retarlo. Una de ellas atrapó una mariposa azul y se la puso en el puño cerrado. Retaría al sabio preguntándole si estaba viva o muerta. Si el sabio decía que viva, ella estrujaría a la mariposa y el sabio perdería. Si por el contrario decía que muerta, ella abriría la mano y la mariposa escaparía, perdiendo de nuevo el sabio. Al plantearle al sabio la pregunta, el sabio sonrió diciéndola, “Depende de ti, ella está en tus manos”

Nuestro futuro y presente está siempre en nuestras manos. No hay culpables si algo nos falla. Si algo conseguimos o fallamos, nosotras somos las únicas responsables. Esa mariposa azul es nuestra vida y en nuestras manos está lo que queremos hacer con ella. Ese es mi bolso azul, el que una vez me regaló André, mientras abrazados en aquel lugar, me contó aquella leyenda, de mariposas azules y sabios.

Ojalá amiga mía cuando contemples un bolso azul recuerdes esta leyenda y rectifiques o no tu vida, sabrás que tú eres responsable de cómo te sientes, hacia donde vas, quien te quiere, a quién amas. Nunca nunca, dejes de ver esa mariposa.

Feliz día.

Precio en tienda 109 €

[social_essentials]

bolso Piel azul

Anillo de alianzas

Anillo de alianzas

Cubrir con un anillo un dedo desnudo, deslizar una alianza en el índice, corazón o meñique, depende un poco de la compañía. Puede que incluso en el mismo dedo que una sortija predispuesta. Y es que la mano necesita ser vestida para cuando llegue el momento, pueda pasear distraída ante la mirada relajada de nuestro acompañante. Y si a veces se detiene por un juego de luces y brillos proporcionado por el mismo sol, solo entonces dejar esa mano libre para que la del acompañante nos la sujete. Ya sea paseando, ya sea disfrutando del paisaje. Siempre allí afianzando ese momento.

Rosa, marfil engarzado en baño de plata, como un palacio en su jardín, como ese jardín bajo tus pasos. A veces no vale, (yo creo que nunca) elegir nuestros complementos al azar. Comprar por comprar, o lo que es peor llevar por llevar. Dejarse llevar por ese impulso y adquirir lo primero que veamos para luego ser una de las muchas primeras del  lugar. La originalidad, la exclusividad no entienden de prisas, entienden de tiempo, de paciencia y de gusto. Lo que para unos les parecen simple ramas, a otros se nos transforman en preciosos complementos para añadir a nuestro árbol.

Quizás el día que nuestra alianza se extinga, que todo parta y nada nos quede, ese anillo que siempre vuelve pueda ser canjeado por ese paseo, por esa ribera, por esos atardeceres. Por eso, por ese quizás o por los que quieras imaginar contempla una vez más lo que naturaleza te regala, lo que un artesano te obsequia. Y pinta con ello, tus cielos, tus días y por supuesto tus despertares.

Alianzas que nunca son efímeras, uniones para toda tu vida en sintonía con la naturaleza, la tuya por supuesto.

Anillo cuarzo rosa 20€

Anillo cuarzo marfil 20€

[social_essentials]

Anillo y alianza